Crédito de la imagen: Yamamoto
Historia y contexto cultural
El volcán Puracé, cuyo nombre proviene del idioma indígena quechua y significa “Montaña de Fuego,” es un símbolo del departamento del Cauca y del Macizo Colombiano. Este macizo es conocido como la “Estrella hídrica de Colombia” porque de allí nacen importantes ríos como el Magdalena, el Cauca y el Caquetá. Durante siglos, el Puracé ha sido considerado sagrado por las comunidades indígenas que habitan la región, como los Misak (o Guambianos). Ellos lo perciben como una conexión espiritual con la naturaleza y la madre tierra, lo que le otorga un profundo valor cultural.
Geografía y ubicación
El volcán Puracé se encuentra a unos 25 kilómetros al oriente de Popayán, en el Parque Nacional Natural Puracé, una de las áreas protegidas más importantes de Colombia. Forma parte del cinturón volcánico de los Andes y del complejo volcánico del Macizo Colombiano. Es un estratovolcán activo que alcanza una altitud de 4.650 metros sobre el nivel del mar. En su entorno, se destacan paisajes de páramos, lagunas, aguas termales, cascadas y una rica biodiversidad que incluye especies emblemáticas como el cóndor de los Andes.
Comportamiento histórico
El Puracé es uno de los volcanes más activos de Colombia, con un historial que se remonta a tiempos precolombinos. Sus erupciones han sido registradas desde el siglo XVII, aunque no todas tienen documentación detallada. Las más significativas ocurrieron en el siglo XX, especialmente en 1949, 1950 y 1956, cuando el volcán mostró actividad explosiva que afectó las comunidades cercanas con emisiones de ceniza, flujos piroclásticos y lava.
En 1977, una erupción importante provocó daños en zonas aledañas, y desde entonces ha tenido actividad sísmica y fumarólica recurrente, especialmente en su cráter principal. Aunque no ha registrado erupciones mayores en las últimas décadas, su comportamiento sigue siendo monitoreado de cerca por el Servicio Geológico Colombiano debido a su carácter activo.
La tragedia de los estudiantes del Liceo en 1949
El 26 de mayo de 1949, una trágica erupción del volcán Puracé cobró la vida de 16 estudiantes del Liceo Nacional Alejandro de Humboldt de Popayán. Motivados por una excursión previa de compañeros, los jóvenes organizaron una expedición al volcán, a pesar de la oposición de los rectores del Liceo y de la Universidad del Cauca.
La excursión partió de Popayán a las 4:00 a.m., dejando atrás a un compañero que, al llegar tarde, decidió viajar solo para alcanzar al grupo. Al llegar cerca del volcán, los indígenas locales advirtieron a los estudiantes sobre la intensa actividad volcánica y se negaron a servir como guías. Sin embargo, el grupo continuó su ascenso, apostando quién llegaría primero a la cima.
Se estima que alrededor de las 9:15 a.m., mientras los estudiantes estaban en la parte alta del volcán, ocurrió una erupción que se escuchó hasta en Popayán. La explosión estuvo acompañada de emisiones de cenizas, gases y fuertes detonaciones que lanzaron bloques de material volcánico. Inmediatamente después, don Benjamín Arboleda, habitante de la zona, organizó una comisión de rescate y logró auxiliar a los dos únicos sobrevivientes: Napoleón Montealegre y Alberto Ávila.
Este lamentable suceso resalta la importancia de atender las advertencias locales y comprender los riesgos asociados a la actividad volcánica. El volcán Puracé, cuyo nombre significa “Montaña de Fuego” en quechua, es uno de los más activos de Colombia, y su monitoreo constante es esencial para la seguridad de las comunidades y visitantes.
Estado actual
Hoy en día, el Puracé continúa mostrando actividad fumarólica en su cráter, liberando gases como dióxido de azufre. Las comunidades cercanas, así como las autoridades científicas, mantienen una vigilancia constante para prevenir riesgos ya que en la noche del 19 de enero presentó recientemente un incremento en su actividad volcánica. Desde la noche del 19 de enero de 2025, a las 23:06, se ha registrado de manera continua una señal sísmica tipo “tremor”, asociada a un aumento de presión interna en el volcán. Esta actividad ha provocado emisiones de ceniza que se han dispersado hacia el suroccidente del volcán.
En respuesta a este comportamiento, el Servicio Geológico Colombiano (SGC) ha declarado la alerta amarilla para el volcán Puracé. Este nivel de alerta indica que el volcán puede presentar fenómenos como emisiones esporádicas de ceniza (erupciones menores) y presencia de gases volcánicos perceptibles en las zonas aledañas.
Las comunidades cercanas han reportado caída de ceniza y olor a azufre, lo que ha generado preocupación entre los habitantes. Las autoridades locales, en coordinación con el SGC, han intensificado el monitoreo del volcán y han recomendado a la población mantenerse informada y seguir las indicaciones de los organismos de gestión del riesgo.
El volcán Puracé es uno de los más activos de Colombia y forma parte del Parque Nacional Natural Puracé. Su edificio volcánico tiene forma de un cono truncado, con un cráter interno y otro externo concéntricos de 500 y 900 metros de diámetro, respectivamente. La actividad fumarólica se concentra en el interior del cráter, principalmente en una gran grieta que atraviesa el fondo y en un importante campo fumarólico en el flanco externo norte del volcán, conocido como “Fumarola Lateral”.
Dada la naturaleza cambiante de la actividad volcánica, es fundamental que las comunidades y visitantes de la región se mantengan atentos a las actualizaciones proporcionadas por las autoridades competentes y tomen las precauciones necesarias para garantizar su seguridad.
Fuentes y Referencias:
Servicio Geológico Colombiano https://www2.sgc.gov.co/Noticias/Paginas/71-a%C3%B1os-de-la-erupcion-del-volcan-Purace.aspx?utm_source=chatgpt.com
https://www.swissinfo.ch/spa
#VolcánPuracé
#ActividadVolcánica
#PuracéEnAlerta
#MonitoreoVolcánico
#PrevenciónYSeguridad
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.